El costo del servicio de la luz es cada vez mayor en México, principalmente por a dos factores, el incremento de la tarifa de la CFE que se ajusta año con año, y el aumento del uso de dispositivos como ventiladores, debido a las cada vez más altas temperaturas. No obstante, hay sistemas constructivos que ayudan a reducir el consumo del recurso en casa de manera permanente.
Casa pasiva: con buen diseño y materiales, el consumo de energía es 90% menos
La Asociación Internacional de Casa Pasiva (iPHA por sus siglas en inglés) es un organismo alemán que emite una certificación a las viviendas que logran reducir su gasto energético al máximo sólo con el uso de materiales adecuados en su construcción y con un diseño de acuerdo a su entorno. Para lograrlo, establece una serie de pasos que, si se siguen de forma correcta, ayudarán a reducir el consumo de 70% a 90%, dependiendo de la localización de la construcción.
En Expo Cihac 2022, feria de construcción que se realiza en México, se mostró un modelo que aplica el procedimiento y que puede ser replicado en la edificación de inmuebles de cualquier parte del país.
Pasos para tener una casa pasiva
El primer paso es conocer la ubicación de la vivienda, tanto geográficamente como su orientación. Por ejemplo, poner la fachada principal hacia el Sur en zonas de clima frío ayudará a que reciba luz todo el día y al norte será el caso contrario. Mientras que si miran hacia el Este recibirá el calor del sol por la mañana y este se liberará a lo largo del día.
También se deben tomar en cuenta la cantidad de viento y humedad que hay en el lugar para saber qué componentes usar en su construcción.
Posteriormente, en obra, se debe contemplar un envolvente aislado para que la temperatura entre el interior y exterior sean distintas. Para lograrlo se pueden utilizar muros rellenos o fachadas ventiladas en el caso de los sitios cálidos.
En este punto se debe intentar que haya la menor cantidad de puentes térmicos posibles, que es los sitios en donde hay variaciones de temperatura debido a la entrada y salida del aire “los más comunes son los balcones, salen de nuestros forjados y van a atravesar este aislamiento que hemos creado previamente y va a funcionar como como un radiado. Se nos va a estar metiendo o escapando la energía a través de estos balcones”, se explica en el recorrido
El siguiente elemento para tener una casa pasiva es la hermeticidad. Se tienen que elegir ventanas que cierren por completo para evitar infiltraciones. Se puede recurrir a productos con herrajes perimetrales con más de cinco puntos de cierre para que la hoja de aluminio o madera presione contra el marco.
“Adicionalmente, vamos a necesitar de sistemas como cintas auto-expansivas, cintas de estanqueidad o barreras de vapor para poder controlar toda esta hermeticidad al interior y mantener un aislamiento térmico,aunque generalmente se van a recomendar sistemas practicables para las ventanas ya que suelen ser los más herméticos”, dice la muestra de Expo Cihac.
También se deben usar vidrios de control solar, dobles o triples para evitar el calor dentro de los inmuebles, sobre todo cuando se encuentran con caras hacia el sol. Se puede complementar con sombreamientos como toldos, persianas o pérgolas de exterior automatizados o manuales para recibir la luz de manera indirecta durante temporadas como el verano.
En cuanto a ventilación existen sistemas mecánicos controlados “el aire que va a entrar de cero grados va a agarrar temperatura y va a entrar a 16,4. Mientras que el de 20 grados va a salir y le va a estar aportando esa temperatura a lo que vamos a expulsar. En el verano va a ocurrir algo similar, pero al inversa”.
Finalmente, lo ideal es que después de reducir el uso de energía al mínimo lo que falta se genere de forma sustentable con sistemas fotovoltáicos o calentamiento solar de agua.