Ramírez Marín niega planes para desaparecer los ejidos
Nadie en el gobierno federal está pensando en desaparecer la figura del ejido en México, subrayó Jorge Carlos Ramírez Marín, titular de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu).
Durante la Asamblea Nacional del Congreso Agrario Permanente (CAP), el servidor público señaló que la gran reforma del campo se realizará con y por las organizaciones del sector rural.
Ante los representantes de las 12 organizaciones campesinas que conforman el CAP, destacó que la reforma que plantea el gobierno quiere que conviva el régimen de la propiedad social, pues "nos da la soberanía territorial de este país, su soberanía territorial a la que no pensamos renunciar".
Sin embargo "tenemos que reconocer que si bien somos soberanos en nuestra tierra, no lo somos en nuestras vidas, porque ni nuestros ingresos ni la producción garantizan una forma de vivir para los millones de personas que hoy todavía dependen del campo".
Tierra en riesgo
El titular de Sedatu alertó que se observa un paulatino deterioro de la propiedad más valiosa del régimen social, la que está alrededor de las ciudades y la que conforma las playas, zonas que se vuelven objetivos de los centros turísticos; "eso es el pan de cada día, a pesar de los esfuerzos, de ustedes y del gobierno por contenerlo".
Reiteró que lo que se ha ganado en soberanía territorial no se ha ganado en soberanía alimentaria ni en la que le puede dar a cada ciudadano un mejor ingreso.
"Allá se dirige la reforma del presidente Enrique Peña Nieto: más producción, más ingreso y más soberanía e igual respeto a la propiedad social", enfatizó Ramírez Marín.
Por lo anterior es necesario que los esfuerzos del gobierno sirvan, porque seguir haciendo lo que se ha hecho hoy producirá el mismo resultado; luego entonces es indispensable que esta reforma sea en serio y a fondo, declaró.
El secretario de Desarrollo Agrario agregó que es fundamental que la reforma no provenga de una sola fuente, "la profunda gran reforma al campo se hará con y por las organizaciones del campo".
En entrevista luego de la Asamblea Nacional del CAP, el funcionario explicó que "la reforma del campo necesita incrementar y hacer más eficiente la asociación que permita mayor productividad. No hay ningún proyecto para eliminar el ejido o la propiedad social".
Peligro minero
También se refirió a los conflictos entre ejidos y empresas mineras que han crecido y rebasan los 100 problemas entre mineras y ejidos o entre ejidatarios derivados de las remuneraciones que pagan algunas empresas mineras.
Estos conflictos se registran en prácticamente toda la República, pero la mayor incidencia se da en Michoacán, Guerrero, San Luis Potosí, Zacatecas y Sonora, agregó.