El proyecto, que requerirá una inversión aproximada de entre 20 y 22 millones de pesos, será financiado en 50% por la CAF y el otro 50% por el gobierno federal, presupuesto en el que se incluyen la terminal que realiza la Sedena, así como ocho kilómetros de obra civil que también desarrollarán y los trenes que serán transferidos del Tren Interurbano México-Toluca.
Se estima que el precio del abordaje sea de 60 pesos, sin embargo, la tarifa no estará definida hasta que se determine el costo total y definitivo del proyecto.
Mantendrá la misma velocidad y estándares que el tramo de Lechería a Buenavista, por lo que el recorrido de 23 kilómetros, con cuatro estaciones intermedias, se recorrerá en 38 minutos aproximadamente, aunque tendrá la particularidad de que las personas puedan abordar con su equipaje.
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“Se prevé que en un futuro pueda llegarse a tener mostradores de documentación en Buenavista, pero en este momento es incierto. Se establecerá cuando se definan las aerolíneas que llegarán y los vuelos que realizarán”, explica Maximiliano Zurita.
Pero para hacer realidad el proyecto, se deben primero superar los retos. Uno de los principales es la liberación de los derechos de paso, proceso en el que se encuentra la SCT, así como llevar a cabo la obra a tiempo, ya que debe estar lista entre tres y seis meses antes de su puesta en marcha para hacer las pruebas necesarias.
