Rodrigo Liendo, doctor en Arqueología e investigador del Instituto de Investigaciones Antropológicas, dijo a El País que en las zonas en las que se han encontrado los objetos es en donde menos se esperaba tener descubrimientos, ya que existían vías férreas desde hace 40 años, por lo que ya habían sido exploradas. En el avance a Campeche y Quintana Roo, sitios menos explorados, se podrían hallar mayores estructuras.
¿Por qué los hallazgos arqueológicos son relevantes?
El proyecto del Tren Maya se ha pronunciado como un defensor de las zonas arqueológicas del sureste del país y ha prometido que se rehabilitarán estos sitios, para potenciarlos con el turismo.
Alejandra Frausto, secretaria de Cultura a nivel federal, anunció en junio de este año que se invertirán más de 700 millones de pesos en Palenque, La Ruta del Puuc, Chichen Itzá, Tulum, Cobá, Calakmul y Edzná. Además, el INAH trabaja de manera cercana a la construcción del proyecto para identificar los descubrimientos.
Por lo que de encontrarse vestigios más importantes, la ruta podría cambiar, dijo Rogelio Jiménez Pons, titular de Fonatur en una videoconferencia, “pero eso se sabrá hasta que haya más detalles”. Antes ya han habido cambios en el trazo y, al menos uno de ellos, influyó de manera negativa en la rentabilidad del Tren Maya, es decir, disminuyó el estimado de las ganancias obtenidas por su operación.
“Cerca de Candelaria, a 5 kilómetros, resultó que el tren pasaba por una zona arqueológica del tamaño de Palenque, y se descubrió con los estudios que Antropología (INAH) nos prometió. Pero lo desviamos porque pasaba por en medio de un juego de pelota”, dijo Jiménez Pons, en entrevista con Obras y Expansión a inicios del 2021.
No dio detalles sobre si la modificación representó cambios en el costo total del proyecto, pero hay otras pistas al respecto.