Cicsa, compañía constructora de Carlos Slim, junto a FCC Construcción, realiza el segundo tramo del Tren Maya que va de Escárcega a Calkiní y mide 253 kilómetros. La fracción de la ruta ha estado envuelta en problemas jurídicos, ya que organizaciones civiles han interpuesto amparos para detener la construcción de la obra.
ICA, bajo la dirección de Guadalupe Phillips, recibió el tramo 4 del Tren Maya mediante adjudicación directa, ya que desde 2008 es la concesionaria de la carretera Mérida-Cancún, por donde transitará el Tren Maya. La parte que construirá irá de Izamal a Cancún con una longitud de 257 kilómetros.
A contrarreloj
Uno de los factores que representa problemas para la construcción de obra pública es la falta de tiempo . Al realizarse proyectos sexenales, se necesitan hacer con la mayor rapidez posible para evitar su cancelación con las administraciones sucesoras.
El Tren Maya es uno de los proyectos que se encuentran comprometidos en este sentido, lo que representa uno de los retos más grandes para Fonatur, dijo Rogelio Jiménez Pons en entrevista con Expansión en abril del 2021, ya que el presidente Andrés Manuel López Obrador ha pedido que las grandes obras de infraestructura se terminen durante su periodo de gobierno.
En diciembre del 2020, el presidente de México pidió a Grupo Carso que se acelerarán las obras en su tramo.
“Es importante, una recomendación respetuosa, fraterna, de que se abran más tramos, entre más tramos haya más se avanza"
Dijo AMLO refiriéndose a la compañía.
“Tenemos que terminar a tiempo y por eso la importancia de las empresas que están a cargo de la construcción del Tren Maya. Celebro que se vaya avanzando de acuerdo al programa y voy a regresar porque es obvio que me importa mucho esta obra”, agregó.
El Universal cuestionó a Rogelio Jiménez Pons sobre la premura de este proyecto, a lo que el funcionario respondió: “tenemos que morirnos en la raya.