El fútbol africano se prepara para dar un salto monumental con la construcción del Grand Stade Hassan II en Marruecos, un gigante arquitectónico que promete redefinir los límites de la infraestructura deportiva a nivel global.
Con una capacidad proyectada de 115,000 espectadores, este proyecto se perfila para convertirse en el estadio de fútbol más grande del mundo, superando al actual poseedor del título, el Estadio Rungrado Primero de Mayo, en Corea del Norte.
Ubicado en Benslimane, a 38 kilómetros al norte de Casablanca, el Grand Stade Hassan II estaba programado para dar inicio a su construcción para finales de junio de 2024, pero no se han tenido noticias al respecto. Según anuncios recientes de Karim Glaibi, miembro del Consejo Municipal de Casablanca, tiene como fecha de entrega estimada el año 2028.
Para elegir al diseño se realizó un concurso internacional de diseño, organizado por la Agencia Nacional de Instalaciones Públicas (ANEP) de Marruecos.
Para él se analizaron diseños de algunas de las firmas de arquitectura más prestigiosas del mundo, incluyendo Herzog & De Meuron, Zaha Hadid Architects y Foster + Partners. Sin embargo, fue el consorcio liderado por Oualalou + Choi y Populous quien colocó su propuesta como la favorita, presentando un diseño que fusiona la tradición marroquí con la vanguardia arquitectónica, comunicaron las firmas.
Christopher Lee, Director General de Populous para la región, expresó su entusiasmo por el proyecto."El Grand Stade Hassan II es un recinto emblemático para los ciudadanos de Casablanca y Marruecos que se convertirá en uno de los grandes estadios del mundo". Esta declaración subraya la magnitud y el impacto esperado de la obra, no solo a nivel local sino también en el panorama global del deporte.
El diseño ganador se inspira en el "moussem", una reunión social tradicional marroquí, y presenta el estadio bajo una cubierta en forma de carpa que emerge entre el paisaje boscoso del entorno.
Tarik Oualalou, arquitecto principal y socio fundador de Oualalou + Choi, describió la visión detrás del proyecto: "El Grand Stade Hassan II está profundamente arraigado en la cultura marroquí, con sus tradiciones y expresiones contemporáneas. Está enraizado en figuras antiguas y primordiales: el Moussem, la tienda y el jardín, así como en la topografía y los paisajes de Marruecos".
La elección de este diseño no es casual. Refleja un esfuerzo consciente por parte de Marruecos de proyectar una imagen que combine su herencia cultural con sus aspiraciones de modernidad y progreso. El estadio, que se erigirá sobre un terreno de 100 hectáreas, no solo será un escenario para eventos deportivos, sino también un monumento a la hospitalidad marroquí y un hito arquitectónico en sí mismo.
El proyecto se enmarca en la preparación de Marruecos para coorganizar la Copa Mundial de la FIFA 2030 junto a España y Portugal, un evento que marcará la segunda vez que el continente africano acoge el evento.
Con un presupuesto estimado entre 4,500 y 5,000 millones de dirhams marroquíes (aproximadamente entre 420 y 455 millones de euros), el Grand Stade Hassan II representa una inversión significativa en el futuro deportivo y económico de Marruecos.
La construcción de este megaestadio plantea desafíos técnicos y logísticos considerables. El equipo de diseño, que incluye a firmas de ingeniería como Maffeis Engineering, ME Engineering, Rider Levett Bucknall, Momentum y SEPSI, tendrá que abordar cuestiones como la sostenibilidad, la accesibilidad y la integración urbana.
