La zona más amenazada es la del Valle de México, en donde se concentran 66 colonias de 22 municipios con puntos de peligro identificados. Lerma y Balsas quedan en segundo y tercer lugar, respectivamente, con 27 y seis colonias amenazadas, respectivamente.
Encharcamientos, el problema
El problema más presentado es el de encharcamientos, que las autoridades definen cuando los escurrimientos sobrepasan la capacidad de absorción de los suelos y la conducción de los sistemas de drenaje, por lo que el agua invade las vialidades.
El municipio en donde más afectó este fenómeno fue San Cristóbal Huichochitlán, con un área afectada de 1,062,840 metros cuadrados.
Las inundaciones, más graves por las afectaciones que tienen a la salud y patrimonio de la población, fue la segunda amenaza más recurrente, con 37 urbanas y cuatro rurales identificadas el año pasado.
En Cultura de México en Chalco, fue en donde se manifestó el desbordamiento más grave, ya que aunque no es la mayor extensión, tuvo impacto en 4,849 habitantes de las colonias 677 viviendas.
De acuerdo con el atlas, solo hay una zona propensa a deslave de tierra, correspondiente a las colonias Barrio Grande, San Luis Ayuca, en la que en 2024 el agua provocó que 1,213 metros cuadrados con 20 viviendas vulneradas.
¿Cuál es el plan de las autoridades?
De acuerdo con el gobierno del Estado de México, la elaboración del atlas de riesgos permitió identificar y atender los puntos más críticos.
En 2024, durante su programa de prevención, se hizo el desazolve 708,506 metros de redes de alcantarillado, 39,950 metros de drenajes a cielo abierto, 3,141 fosas sépticas y 117 cárcamos de bombeo.