Sofitel hace de un edificio porfiriano un hotel de lujo con toque francés
CIUDAD DE MÉXICO. La fachada del inmueble ubicado en Paseo de la Reforma 297, que data de la época porfiriana, fue sometida a varias maniobras que la desplazaron unos centímetros de su ubicación original para convertirla en la puerta de entrada de lo que será un bar de corte francés y el punto de entrada al nuevo hotel de lujo Sofitel.
"En Sofitel es muy importante la cultura y la historia de un país. Dentro de la historia del hotel, el presente y futuro de México se combina en esta casa histórica donde vamos a hacer un bar premium. No fue una complicación, al contrario, fue una excelente opción de combinar la cultura mexicana y francesa", comenta Sylvain Chauvet, gerente general de Sofitel Mexico City Reforma.
En los últimos años esta dirección se vio envuelta en suspensiones temporales y polémicas, pues vecinos de la colonia Cuauhtémoc se opusieron desde un principio a la edificación del hotel de 40 pisos; sin embargo, el proyecto continúa en construcción bajo la apuesta de convertirse en el nuevo referente de lujo en la zona, pero con el diferenciador de tener toque francés.
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"Tenemos un hotel con diseño moderno y vamos a hacer acuerdos con museos y salas de arte para combinar la cultura francesa y mexicana. En la parte de bienestar vamos a tener un spa de L'Occitane, que va ser el primero de la firma en un hotel de lujo", aseguró Chauvet.
La apertura del hotel será en septiembre de este año y a partir de 2020 esperan tener al menos una ocupación de más de 60% y continuar en niveles de 70%, principalmente proveniente de huéspedes de negocios.
De acuerdo con César Ramírez, líder del sector Turismo de KPMG México, el viajero de lujo demanda una experiencia diferente, una oferta gastronómica, internet y que las instalaciones sean amigables con la naturaleza.
"El mercado de lunes a viernes es de negocios, mientras que el de viernes a domingo es el de turista, principalmente de Estados Unidos y de otros estados del país. El mercado de turismo no es tan sencillo como el de negocios", dice Chauvet.
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Ramírez afirma que el mismo viajero de negocios se convierte en turista de la Ciudad de México, ya que "las personas que nos visitan por trabajo llegan los fines de semana y se concentran en conocer los atractivos de la capital. Aprovechan los viajes de negocios para el turismo de placer".
Este nuevo hotel sobre Paseo de la Reforma se suma a los más de 28 inmuebles que la firma de origen francés Accor se encuentra operando con diferentes marcas en México. Ibis y Novotel, por ejemplo, están centrados en un mercado más económico, mientras que Fairmont agrupa a un mercado de lujo, por lo que Sofitel sería la segunda marca para este segmento que la hotelera establecería en el país.