Agregó que en estos momentos de dificultades en la operación de compra-venta, “los valores son más volátiles y la fijación del valor tienen mayor dificultad”.
También se refirió a la afectación en la parte operativa, pues las instrucciones de confinamiento impiden la labor de inspección de los inmuebles in situ, además del levantamiento de fotos de interiores, la verificación de planos, etc.
“Parte de nuestro trabajo puede realizarse con home office pero debemos acercarnos al inmueble, visitarlo y analizarlo, todo eso lleva consigo una serie de dificultades. Si el confinamiento es mayor habrá más dificultades”, expresó Leirado.
El tren de la vivienda se detiene, otra vez
Aunque en estos momentos es difícil predecir cuál será el comportamiento del mercado de la vivienda y cómo podría recuperarse, debido a una afectación económica general, el director de Tasvalúo admitió que ya antes de la emergencia sanitaria se hablaba de un descenso en la colocación de vivienda del 15% en este 2020.
Si factores como el financiamiento otorgado por la banca y la colocación de unidades por parte de los principales institutos, como son Infonavit y Fovisste, además de los esperados ajustes a la baja en las tasas hipotecarias “no funcionan, el mercado se va a constreñir todavía más”, consideró Leirado.
Los bancos “deberán mantener su solvencia y las áreas de riesgo tiene que jugar al difícil equilibrio de tener condiciones favorables de adquisición de vivienda, al tiempo que la limitan para que no se produzca un número determinado de impagos que pueda desequilibrar sus propias cuentas” estimó el experto.
Uno de los escenarios que el director de Tasvalúo dibuja es un mercado más ”estrecho” en términos de compradores, a pesar de que se trata de un bien cuya adquisición se puede postergar pero que tarde o temprano se debe realizar. Esta situación promete poner a competir a los operadores que deberán ofrecer una mezcla de precio y calidad competitiva.
En España, por ejemplo y guardando las debidas proporciones, los portales que anuncian venta de vivienda ya han registrado ajustes en los precios por parte de los propietarios que van del 10 al 29% informó el diario El País la semana pasada.
En la Ciudad de México, aunque todavía no es del todo notorio, según las estadísticas de Propiedades.com zonas como Benito Juárez y Polanco comienzan a mostrar descensos. En Polanco, por ejemplo el precio promedio de un departamento en venta se mantuvo en 16,800,000 pesos, pero en 2019 llegó a ser de 17,400,000 pesos. Mientras en la delegación Benito Juárez, el precio promedio de venta de departamentos se mantiene estático, en 3,590,000 pesos.