La prioridad es distinta a la de hace algunos meses. Hoy, el trabajo en casa tiene un valor importante, lo cual impulsará un reordenamiento de los espacios para que éste pueda llevarse a cabo en cualquier recoveco dentro de la recámara o la sala, por ejemplo.
Otra transformación que vislumbra Soto-Hay es que algunos desarrolladores se darán a la tarea de crear un ‘micro hábitat’ tanto en áreas exteriores como interiores de los inmuebles, con prioridad en la ventilación e iluminación natural, lo cual será un diferenciador importante al momento de la comercialización.
Por su parte, Marco Torres, gerente de Operaciones en Homie, opina que el replanteamiento ya empezó. Ahora las desarrolladoras estarán preocupadas porque existan mejores condiciones de higiene e incluir más metros construidos en las viviendas. “Es probable que la apuesta del sector sea por aumentar el metraje, sacrificando el número de unidades.”
En cuanto a las preferencias, inquilinos y compradores buscarán la privacidad y comodidad. Muchas veces sacrificábamos espacio por cercanía, ahora queda claro que las áreas abiertas, con mejor ventilación, flujos de aire e iluminación serán apreciadas.
Reinventar reglas
Asimismo, establecer las medidas de sanidad en condominios será una prioridad; las aperturas de contacto y las aperturas de distancia.
En las áreas comunes, considera Soto-Hay, se tendrán que aplicar algunas restricciones y encontrar la manera de evitar contagios, quizás hasta utilizar tecnologías para la toma constante de temperatura a los condóminos.
La nueva reglamentación en torno a las áreas comunes, destaca Torres, podría llevarse a cabo con controles estrictos, además de especificar las normas de higiene, el número de usuarios y los horarios específicos.
En los accesos podría evitarse que haya una entrada única. “Al colocar varios acceso se puede redistribuir el tráfico de personas. Hay grandes desarrollos que construyen por torres y cada una tiene un acceso diferente”, indica el directivo de Homie.
En los elevadores puede ser un tema complejo porque más que aumentar el número de estos equipos, lo cual encarecería la inversión y gestión, la apuesta podría sea por la higiene y sanitización.