Oficinas
Uno de los sectores más afectados por la pandemia y que aún no se recupera es el corporativo, principalmente en la capital del país.
En 2021, las oficinas vacías en Ciudad de México y Monterrey eran tantas que alcanzaban para atender la demanda de alquiler de las empresas por los siguientes siete años, de acuerdo con Datoz.
En CDMX, 24.5% del inventario total estaba disponible. En 2023, la cifra bajó a 22.37%, sin embargo, el mercado no se ha mantenido estático. Ha habido un juego de ocupación y desocupación de espacios, ya que mientras algunos lugares son alquilados, otros se inauguran, lo que además ha traído una reconfiguración del sector.
Los proyectos que durante la pandemia estuvieron detenidos eran, en su mayoría, clase A, la más moderna, sustentable y dotada de tecnología, y fueron terminados de construir entre 2022 y 2023. Para acelerar la ocupación los precios bajaron, “para aprovechar la coyuntura hubo movimiento y se aprovechó la calidad disponible, por lo que saltó de la clase B a la clase A y espacios clase plus que tienen mejores amenidades y ubicaciones”, enfatiza Mireles.
No obstante, que sean edificios más novedosos no ha sido suficiente, “deben hacer a las oficinas lo más atractivas posible para que las personas vuelvan a su espacio de trabajo. Tienen que ofrecer cosas que el usuario no puede encontrar mientras hace home office”, dice Mauricio Rubio, project manager associate director de JLL.
Estaciones de trabajo fijas pasaron a no estar asignadas para quitar esa rigidez y monotonía en la distribución de las personas, así como para las empresas que usan formato híbrido como modo de trabajo, ya que las personas que trabajan desde casa no dejan sitios vacíos. En consecuencia, se reducen este tipo de espacios, pero se amplían los de convivencia, “fomentar la socialización y colaboración de las personas es fundamental para generar las ganas de regresar”, agrega el experto.
En el mismo sentido se encuentra el uso de la tecnología. Ahora, es fundamental que los edificios cuenten, mínimo, con una conexión de internet de alta velocidad y sin interrupciones para facilitar la conectividad con personas que no colaboren en el mismo espacio y utilizar nuevas herramientas de gestión introducidas durante el confinamiento.
Para las empresas se ha vuelto tan fundamental que están haciendo los cambios con las operaciones activas. HSBC, en Reforma, quiso remodelar varios pisos de su inmueble para mejorar la tecnología utilizada y apostar por la creación de experiencias, cuenta JLL.
Sin embargo, las estrategias no han sido suficientes para subsanar la desocupación del mercado de Ciudad de México, por lo que empresas dueñas de edificios han optado por alternativas como la reconversión a departamentos y hospitales, además de detener los proyectos hasta ver mayor estabilización, añade Sergio Mireles.