Los gustos de los millennials y generación Z transforman la oferta de vivienda

Este giro en las preferencias inmobiliarias obliga a desarrolladores y vendedores a repensar sus estrategias para satisfacer las demandas de una nueva era.

El nuevo perfil del comprador: joven, flexible y consciente del espacio

Roberto Reveles, líder comercial KAM de Inmuebles24, comenta que, actualmente, el 60% de las búsquedas de propiedades provienen de personas entre 25 y 40 años.

“Los millennials y la generación Z están tomando las riendas y sus prioridades son notablemente diferentes a las de generaciones anteriores", dice. Este nuevo grupo de compradores se caracteriza por su flexibilidad laboral, con una gran proporción que trabaja desde casa, lo que amplía su radio de búsqueda.

Ya no están atados a las grandes urbes por la necesidad de estar cerca de la oficina e impulsan un éxodo hacia ciudades medianas que ofrecen mejor calidad de vida.

La seguridad y las áreas verdes: los nuevos requisitos

Para estas nuevas generaciones de compradores, la seguridad es la prioridad número uno, independientemente de la ubicación o el propósito de la compra.

Reveles señala que los compradores están dispuestos a sacrificar otros aspectos, como el tamaño de la vivienda o la cercanía al centro de la ciudad, con tal de vivir en zonas más seguras.

Las áreas verdes también pasaron de ser un lujo a una necesidad.

"Hemos visto un aumento significativo en la demanda de propiedades con acceso a espacios verdes", comenta Reveles. "Los compradores están buscando activamente jardines, terrazas o áreas comunes verdes, incluso si eso significa vivir en unidades más pequeñas”.

Esta tendencia no solo responde a un deseo de conexión con la naturaleza, también tiene un impacto positivo en la seguridad del vecindario. Reveles detalla que las zonas con más áreas verdes pueden experimentar hasta 20% menos de delincuencia.

El auge de las ciudades secundarias

Mientras que Ciudad de México, Guadalajara y Monterrey siguen siendo mercados importantes, ciudades como Querétaro, Mérida y Tijuana experimentan un boom inmobiliario.

"Estamos viendo un interés creciente en ciudades medianas que ofrecen una mejor calidad de vida, Querétaro, por ejemplo, se ha convertido en un imán para familias jóvenes que buscan escapar del tráfico y la contaminación de las grandes urbes, sin sacrificar oportunidades laborales", dice el experto.

Esta tendencia reconfiguró el mapa inmobiliario del país, con desarrolladores prestos a satisfacer la demanda en estas nuevas áreas de crecimiento.

Particularidades por ciudad: lo que buscan los compradores

Las preferencias de los compradores varían dependiendo de la ciudad:

- Ciudad de México: La cercanía al trabajo y a servicios pierde peso frente al costo, “porque saben que a mayor cercanía y en una zona más céntrica el precio aumenta”, dice el experto. Las personas buscan estar cerca de medios de transporte que las lleven a su empleo, pero un poco lejos de las colonias más populares para ahorrar.

- Querétaro: En el centro de la ciudad, los compradores buscan cercanía a servicios y están dispuestos a sacrificar espacio por ubicación. Sin embargo, en las zonas menos urbanizadas, la prioridad es obtener más metros cuadrados y tranquilidad, ideal para quienes trabajan desde casa.

- Monterrey: La demanda se concentra en desarrollos que ofrecen una combinación de cercanía a zonas industriales, espacios verdes y amenidades modernas. Los compradores valoran la proximidad a centros de trabajo, pero sin sacrificar calidad de vida.

- Guadalajara: Similar a la Ciudad de México, aquí se busca un equilibrio entre ubicación y calidad de vida. Los desarrollos verticales con amplias áreas comunes son populares.

- Mérida: El mercado está dividido entre compradores que buscan propiedades para vivir y aquellos que invierten en el mercado turístico.

- Tijuana: Con el auge de la industria y el nearshoring, la demanda se centra en viviendas que ofrezcan servicios básicos de calidad y buena conectividad, especialmente cerca de zonas industriales.

La dicotomía del mercado: vivienda vs. inversión

Otro cambio significativo en el mercado es la creciente proporción de compradores que buscan propiedades como inversión, no necesariamente para habitarlas. El especialista de Inmuebles24 revela que, actualmente, la proporción entre compradores que buscan vivienda para habitar y aquellos que buscan invertir es de aproximadamente 55% a 45%, una brecha que se ha estrechado considerablemente en los últimos años. Hace un lustro, la proporción era 75% para habitar y 25% para inversión.

Esta tendencia impulsa el desarrollo de propiedades en zonas turísticas y cerca de centros de entretenimiento, con un enfoque en la rentabilidad a corto plazo a través de plataformas de alquiler vacacional.

El desafío para los desarrolladores

Frente a estos cambios radicales en las preferencias de los compradores, los desarrolladores deben adaptar su oferta.

Roberto Reveles cita un desarrollo en Nuevo León que, al incorporar amplias áreas verdes y enfocarse en la seguridad, logró vender sus unidades tres veces más rápido que proyectos similares en la zona, y a un precio 18% superior al promedio del mercado.

"Los desarrolladores están aprendiendo que escuchar al mercado y adaptarse rápidamente no sólo acelera las ventas, sino que también permite obtener mejores precios", afirma.

El futuro del mercado inmobiliario

A medida que el mercado evoluciona, una tendencia llegó para quedarse: la preferencia por viviendas nuevas sobre usadas crece.

"El comprador de hoy es más selectivo y paciente", explica Reveles. "Están dispuestos a esperar y pagar más por una propiedad que cumpla con todas sus expectativas, en lugar de conformarse con algo que no se ajuste perfectamente a sus necesidades".

Esta tendencia impulsa una ola de demoliciones y reconstrucciones en zonas urbanas, con un enfoque en desarrollos verticales que maximicen el espacio y ofrezcan las amenidades que los compradores modernos demandan, de acuerdo al especialista.