La Ciudad de México, el mercado con mayores problemas para recuperar su ocupación desde la pandemia, concentró un inventario de 9.1 millones de metros cuadrados de oficinas corporativas disponibles y registró 17.23% de espacios disponibles.
Estos datos ordenan la discusión: el mercado muestra más actividad y, ante ese telón de fondo, conservar a los inquilinos existentes se vuelve clave.
Renegociar para conservar sin dañar al negocio
En los portafolios más grandes, la retención inicia en el contrato.
El reporte de Fibra Uno (FUNO) del segundo trimestre de 2025 a la Bolsa Mexicana de Valores señala que, en pesos, los contratos renovados para oficinas subieron 210 puntos base contra 2024, una recuperación en los descuentos dados desde el confinamiento, pero quedaron por debajo de la inflación medida por Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) un índice de inflación que los contratos usan para actualizar la renta en México.
En dólares, las renovaciones cayeron 230 puntos base y quedaron por debajo del CPI, otro índice de inflación usado como referencia en esos contratos.
Si una renovación queda por debajo de esos indicadores, el ingreso del propietario no avanza al ritmo de la inflación de referencia, pero es una decisión que se ha preferido antes de dejar ir a los inquilinos. Es decir, la empresa sigue dando condonaciones a sus arrendatarios a cambio de su lealtad.
El mismo documento explica la razón: Menos del 70% de los metros cuadrados renovados tuvieron un descuento comparado con su renta anterior.
"La recuperación paulatina en la ocupación de oficinas ha sido el principal obstáculo para lograr incrementos altos en este segmento", señala FUNO en su reporte.
Fibra Mty detalla cómo ata ese ajuste: 52.9% de sus ingresos de oficinas y comercio los ajusta a la inflación registrada por el CPI y 40.5% con el indicador nacional, pero 2.0% tiene techo sin importar si la inflación es más grande y 4.6% mantiene una tarifa fija.
La empresa indica que cierra renovaciones con “precios de renta cercanos a los establecidos en el mercado” y que, con la información disponible, no prevé un impacto material en la renta por metros cuadrados de las renovaciones en oficinas.
Plazo y continuidad del flujo
El tiempo del contrato pesa en la retención. En el segundo trimestre de 2025 se concretó la ocupación de 6,767 metros cuadrados de oficinas en Nuevo León con un contrato en dólares y plazo forzoso mayor a 10 años.
La compañía resalta que esa operación supera el volumen del trimestre previo en ese mercado y se coloca como la más relevante desde el inicio de la pandemia para ese portafolio.
También informa que, de los ingresos que vencían en los últimos 12 meses, retuvo 83% mediante renovaciones y nueva ocupación. Es decir, el vencimiento y la duración del contrato sostienen los ingresos sin saltos.