La construcción de trenes ha tenido un papel protagónico en la agenda de infraestructura de esta administración federal. Desde el Tren Maya hasta el Suburbano que unirá a Santa Lucía con el resto de la Zona Metropolitana del Valle de México se han entablado estrategias para facilitar su desarrollo, como la declaratoria para considerarlos como actividades de seguridad nacional.
En 2023, expropiadas más de 914 hectáreas y 366 mil metros cuadrados para trenes
Entre estos sistemas se encuentra la expropiación. Este 2023, el gobierno federal a través de la Secretaría de Desarrollo Territorial y Urbano (Sedatu) ha expropiado 914 hectáreas y 366,828.11 metros cuadrados, lo equivalente a 1,331.4 veces la cancha del Estadio Azteca, para la edificación de los ferrocarriles, de acuerdo con el Diario Oficial de la Federación (DOF).
El procedimiento más reciente fue publicado el 23 de mayo. De acuerdo con el documento, se expropiaron 113,838.5053 metros cuadrados en los municipios de Tultitlán, Tultepec y Nextlalpan en la Ciudad de México por parte de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) para la construcción de los Centros de Transferencia Modal 1, 3, 4 y 6 de la Línea 1 del Tren Suburbano, que llegará de Lechería al Aeropuerto Felipe Ángeles (AIFA).
El más significativo por sus dimensiones se dio a conocer el 4 de enero, por 137,642.07 metros cuadrados, en los mismos municipios también para los Centros de Transferencia Modal.
Este proyecto es clave para el desarrollo de la actividad del AIFA. Durante la construcción del aeropuerto, la Asociación Internacional de Aeropuertos (ACI por sus siglas en inglés) señaló que uno de los grandes pendientes de la propuesta era su conectividad con las ciudades alrededor, por lo que el gobierno le ha dado celeridad a la edificación de carreteras, no obstante, aún falta una solución de transporte público masivo que llegue la CDMX.
La propuesta es el Tren Suburbano, pero tras más de dos años de haber iniciado su construcción, todavía no ha sido terminado. Los principales retos han sido un retraso en las obras por no tener la liberación total de los derechos de vía para el patio de maniobras y conflictos sociales con las colonias aledañas.
Para el Tren Maya también se han expropiado terrenos. El más reciente se anunció en el DOF el 12 de mayo por 8,118.9 metros cuadrados en Othón P. Blanco en Quintana Roo para la construcción del Tramo 6.
En este julio deberían realizarse las primeras pruebas de operación del proyecto ferroviario para comenzar a operar en diciembre de este año, pero para mayo de este 2023, del tramo 1 al 4 sólo había 45.1% de vía terminada.
El Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec también ha demandado terrenos privados este año el 2 de febrero, divididos en dos publicaciones. La primera de 412 hectáreas, 54 áreas, 45 centiáreas, la segunda de 502 hectáreas, 42 áreas y 60 centiáreas. Aunque el proyecto no es abarcado de manera completa por la construcción de infraestructura ferroviaria, sí se contempla un ferrocarril, parte pilar del proyecto, que vaya de Oaxaca a Veracruz.
Las vías ya existen, pero requieren rehabilitación para cumplir con las expectativas de transporte logístico.