Con este análisis coincide Gonzalo Méndez Dávalos, presidente de la Cámara Nacional de la Vivienda (Canadevi), quien resalta que la industria inmobiliaria es predictiva: es la primera que cae, pero también la primera que se reactiva.
“Es momento de pensar fuera de la caja, los paradigmas han cambiado, la pandemia nos ha hecho reflexionar que debemos hacer las cosas diferentes. Hoy tenemos instituciones sólidas, sobre todo Infonavit, Fovissste y los bancos, quienes servirán para apalancar para seguir trabajando; posiblemente habrá menos oferentes, pero más robustos”, asegura.
Asimismo, ante la ola de desempleo para los próximos meses, Méndez señala que la población sin seguridad social aumentará, por lo que hoy más que nunca es importante atender a quienes forman parte de la economía informal.
“Estamos trabajando en la creación de nuevos esquemas, en conjunto con la Sociedad Hipotecaria Federal, para atender a más de 50% de los compradores que forman parte del déficit de vivienda”, destaca.
Acelerar el paso a la digitalización
Covid-19 provocó tendencias como viviendas adaptables, comunidades planeadas, tours virtuales, visitas remotas a la zona, asistentes virtuales, solicitud de créditos hipotecarios en línea, firma electrónica y pagos electrónicos. Asimismo, cambios en el uso de los espacios y una mejor utilización de estos.
Sin embargo, también dejó ver muchas áreas de oportunidad. “De los 80 millones de usuarios de internet, de los cuales 60% pretende rentar y 40% comprar una vivienda, apenas 8% busca propiedades por internet (comparado con 12% de Argentina, 20% de España y 55% de Estados Unidos, por ejemplo), lo cual significa que todavía existe una gran oportunidad para que los desarrolladores generen estrategias digitales”, opina Roberto Esses, director general de Viva Anuncios.
Otra área de oportunidad, refiere el directivo, está en PropTech (también llamado Real Estate Technology), término utilizado para agrupar innovaciones y nuevas tecnologías para el sector inmobiliario, dado que influye desde la planeación urbana hasta el diseño y la construcción, las ventas y el arrendamiento o la gestión.
“En nuestro país existen apenas 50 empresas relacionadas con tecnología en el sector inmobiliario, mientras que en otros llegan a más de 500”, señala Esses, para quien un reto aún es tener valuaciones online.
En opinión de Isaac Metta, director general de Hogares Unión, “el consumidor ya está listo para transacciones online. Desde hace años capturábamos al cliente en internet, pero ahora no solo es el lead, sino avanzar hacia el cierre de ventas y el pago del apartado, que forma parte de la experiencia. Hoy la ‘sombrilla’ está metida en los buscadores y redes sociales”.
Por su parte, Jesús Orozco de la Fuente, director general de Tinsa México, señala que hay que reconocer que se ha avanzado en la transformación digital, pero en el área registral, que corresponde al gobierno, aún existen bloqueos; debe completarse el ciclo.