La llegada de los espacios colaborativos cambió todo. Hace más de una década, una nueva forma de trabajar que da privilegio a la convivencia y flexibilidad fue adoptada por empresas de todo el mundo. Sin embargo, durante el inicio de la pandemia de coronavirus, el esquema, así como el resto del sector, se tambaleó con la llegada del home office.
Un año después de la llegada del coronavirus que transformó al mundo, los mismos fundamentos que dieron inicio al co-trabajo lo ayudaron a renacer.
We Work, una de las empresas pioneras en el esquema, ha logrado crecer alrededor de 10% en comparación con el año pasado, mientras que el resto del sector cae. Durante el primer semestre del 2021 se registraron 1.6 millones de metros cuadrados de oficinas vacíos y una demanda de -69.1% en comparación con el 2020, indican datos de Colliers.
“Fueron meses muy duros y hay muchos miembros que se vieron afectados por esta situación y que no pudieron seguir operando, pero gracias al trabajo de este fortalecimiento de la flexibilidad, los últimos seis meses han sido de crecimiento neto para nosotros, lo cual es un es un preámbulo de un boom que yo creo que ya había tardado en llegar. Todos estos cambios que hoy están surgiendo y que parecen tan naturales deberían haber sucedido con o sin pandemia”, dice en entrevista Álvaro Villar, director general de WeWork México.
La empresa ha implementado una serie de esquemas a nivel mundial y nacional, que aseguran ayudarán a mejorar la situación por la que atraviesa el sector inmobiliario corporativo.
Una de sus estrategias más innovadoras es el pago con criptomonedas, debido al crecimiento de su uso en todo el mundo . Este sistema se implementó en las sedes de We Work en Estados Unidos a mediados de abril de este año, y se espera que en un par de meses llegue a México, el sexto país con más adopción de este dinero digital.
La nueva opción se agrega para brindar más alternativas a las empresas en las formas que tienen para contratar oficinas. Además, se podrá aplicar en ambos sentidos, también las compañías arrendadoras de los edificios podrán recibir este tipo de pagos.
Otra de las nuevas estrategias del negocio y que ha ayudado a ocupar sus espacios es All Access, un modelo que permite a los trabajadores afiliados a las oficinas tener una sede central de WeWork en la que desempeñan sus labores, pero también la facilidad de acceder a cualquier otra de las sedes alrededor del mundo. De esta manera se continúa con la opción de trabajar desde cualquier parte y con instalaciones adecuadas.
La empresa además implementó On Demand, opción para poder reservar los espacios por día o por hora a través de una aplicación, sin tener que realizar trámites más complejos.
“Hemos fortalecido los fundamentos de nuestra empresa. Creamos valor con la flexibilidad y no solamente en ubicaciones y facilidades en el contrato que nosotros ofrecemos a nuestros miembros, sino también llevándolo más allá hacia otras tendencias”, agrega el directivo de la compañía de coworking.
Para él, este enfoque es la clave en la situación sanitaria actual. La incertidumbre de hacia dónde se moverá la situación económica impide hacer planes fijos a largo plazo, por lo que considera que para las empresas debe ser más sencillo adecuar sus sitios de trabajo a las necesidades, por ejemplo, ampliar o reducir el espacio de oficinas que ocupan rápidamente.
“¿Qué empresa hoy puede asegurar dónde estará parada en tres meses?, hay muchas que han crecido mucho durante la pandemia y hay otras que se han visto afectadas y el poder ajustar tus necesidades en tiempo real y costos, es una necesidad”, explica Álvaro Villar.
Los beneficios que este esquema traen tanto para el sector, como para las empresas arrendatarias, provocarán que se vuelva la regla en el sector inmobiliario. El directivo considera que los contratos rígidos y los impedimentos para pagar se quedarán en el pasado y evolucionarán conforme avance la contingencia sanitaria.
Para este 2021 We Work tiene como objetivo que 70% de las personas que habitan sus 26 ubicaciones en México sean de empresas con más de 1,000 colaboradores.
Sin dejar de lado el apoyo a las pymes, por lo que han iniciado una alianza con la Asociación de Emprendedores de México (ASEM) para dar beneficios exclusivos y apoyo educativo, así como el programa Mujeres para el Mañana, a través del cuál se brindarán espacios de trabajo gratuitos para diez mujeres trabajadoras. Igualmente lanzaron una opción educativa para que estudiantes puedan reunirse en las oficinas. Una de las instituciones que ya participa es la universidad TecMilenio.
