Las estrategias de vivienda buscan resolver un déficit de 8.2 millones de viviendas en el país. En 2023, el número de unidades habitacionales construidas fue de 130,996, cifra inferior a la meta anual proyectada.
El gobierno considera una distribución geográfica para evitar la concentración en zonas periféricas y garantizar acceso a servicios básicos, aunque especialistas advierten que eso podría incrementar los precios del suelo.
El presupuesto destinado al Programa de Vivienda Social para 2025 asciende a 32,000 millones de pesos, lo que representa 84.1% del total asignado a la Sedatu.
Sin embargo, especialistas advierten que el éxito de esta iniciativa requerirá superar varios desafíos. El más recurrente: el acceso a tierra bien ubicada y con servicios. “La estrategia para la adquisición de terrenos es clave en el éxito del programa”, señaló la calificadora Moody’s, al advertir sobre el alto costo del suelo en zonas urbanas con acceso a servicios básicos.
La industria también alerta sobre los posibles efectos del programa en los precios. “Por un simple efecto de oferta y demanda (...) es hasta cierto punto de esperarse que el precio de los terrenos tienda a subir”, explicó René Robles, director analista de crédito en Moody’s Local México.
Requisitos y proceso de la convocatoria
Podrán participar personas físicas y morales que se dediquen a la edificación de vivienda, asistencia técnica, verificación y supervisión de obra.
El registro se realiza de manera digital mediante la plataforma oficial, en donde se deberá ingresar información fiscal y legal, así como cargar una serie de documentos técnicos y administrativos. El proceso incluye validación jurídica, técnica y financiera, cuya aprobación es requisito para pasar a la evaluación del Comité de Evaluación Técnica (CET).
Entre los documentos obligatorios están actas constitutivas, poderes notariales, constancias fiscales, estados financieros y experiencia comprobable.
También se solicita una metodología operativa que describa las capacidades y estrategias de atención a beneficiarios. Los aspirantes tendrán cinco días naturales para concluir la carga documental desde que crean su usuario. Si no lo hacen en ese plazo, deberán comenzar el trámite desde cero.
Una vez obtenidas las tres opiniones favorables, la solicitud será sometida al CET. Si el comité la aprueba, el solicitante será registrado oficialmente en el padrón y podrá participar en el programa.