El tipo de negocios que llegan y los tamaños que buscan
El cambio en la composición de la oferta se refleja en los tamaños de los espacios demandados. El área promedio visitada en locales pasó de 90 a 120 metros cuadrados en un año, mientras que en el segmento industrial la cifra bajó de 1,400 a 1,000 metros cuadrados.
Según el análisis de Spot2.mx, esta reducción se debe a que muchas empresas eligen instalarse primero en naves pequeñas para validar operaciones y después, en una segunda etapa, escalar hacia proyectos más grandes.
Los giros comerciales que predominan en estas zonas industriales se diferencian de los que se concentran en colonias céntricas.
Panaderías de cadena, casas de empeño, zapaterías, gimnasios, tiendas de mayoreo y de conveniencia son comunes en Azcapotzalco, Iztapalapa o Tlalnepantla, mientras que en corredores como Roma o Condesa suelen instalarse restaurantes de autor, boutiques o galerías.
En otras palabras, se trata de un comercio orientado a la recurrencia, al consumo básico y a los servicios inmediatos que requiere la población vinculada a la industria.
Planeación, trámites y perspectivas
La instalación de nuevos negocios en estos corredores no enfrenta grandes trabas legales, aunque la planeación previa resulta determinante. “El procedimiento es sencillo, pero la adecuación y los tiempos de espera dificultan que esto se vea de manera ágil”, puntualizó Héctor Magaña.
Para los especialistas, lo que viene es la consolidación de ecosistemas completos en torno a los polos industriales.
Pablo Gadsden afirmó que la disponibilidad de terrenos estratégicos permitirá detonar corredores con una visión de largo plazo.
"Este tipo de proyectos no solo impulsa el desarrollo industrial, sino que también genera la necesidad de oficinas, vivienda y servicios alrededor de los polos donde se instalan”, señaló.
De esta forma, los nuevos espacios industriales no solo atraen inversión manufacturera o logística, sino que desencadenan un efecto multiplicador en otros segmentos inmobiliarios.
Los flujos industriales sostienen el comercio de proximidad y a su vez los servicios comerciales fortalecen la operación de los parques industriales.