Baumgartner explicó que las mascarillas de protección que están imprimiendo son una especie de diadema con un acrílico. “Hay una demanda enorme y mucha gente trabajando en hospitales no tienen este tipo de protecciones. Empezamos a imprimirlas de manera casera con nuestras impresora en 3D”.
Al tiempo que imprimían estas mascarillas, se enteraron de que en España estaban utilizando una pieza llamada splitter, que es una pieza con forma de Y, cuya función es duplicar la capacidad de un ventilador al permitir conectar a dos personas a un equipo y no solo a una. “No es lo ideal, pero para una emergencia puede salvar vidas”, expresó el arquitecto.
Baumgartner invitó al diseñador industrial Ariel Rojo a sumarse al proyecto. El diseñador revisó la pieza. “Tenía algunas formas de mejorarse. Ariel hizo una versión mejor que la que habían usado en Europa”, relató el director de Space.
Luego de varias semanas de estar reuniendo a makers con impresoras 3D y de hacer una cadena de producción de splitters en todo el país, han fabricado más de 1,500, pero la meta es hacer 3,000. Esa es “una cantidad teórica porque nadie tiene claro qué cantidad de respiradores hay en el país. En teoría hay 3,000 por eso la meta es producir igual cantidad, para duplicar la capacidad de respiradores”, dijo el arquitecto.
Autodesk, una de las marcas líderes en el desarrollo de software para impresión 3D, explica en su página web que este proceso permite producir objetos “a través de la adición de material en capas que corresponden a las sucesivas secciones transversales de un modelo 3D” y puede usarse con casi cualquier material, incluyendo hormigón o tejido vivo.
Algunas de las industrias que ya han adoptado este proceso son la aeroespacial, la médica, la automotriz y el diseño en general.
Baumgartner precisó que hay distintos tipos de esfuerzos: “Hay empresas en el norte del país, por ejemplo, que tienen varias impresoras, pero también tenemos un maker en Mérida imprimiendo desde su casa con una impresora familiar. La capacidad de respuesta entre uno y otro es distinta, algunos se tardarán 10 o 12 horas en imprimir una pieza, otros cuatro pero al final del día todos suman”.
Las personas que tienen impresora 3D y que están interesadas en ayudar pueden ingresar a la página makersmexico.org, ahí pueden bajar los archivos de todas estas piezas, los que están disponibles para cualquiera. Y quienes quieren ayudar pero no tienen impresora pueden realizar sus donativos en las misma página para la compra de material. Los hospitales interesados pueden solicitar ayuda en la misma página.