"Hacer maquetas": una alternativa para la transformación inmobiliaria

Luego, un 12 de diciembre visitó la antigua Basílica de Guadalupe y notó las condiciones de deterioro en que se encontraba; hizo una maqueta y la presentó al entonces abad Guillermo Schulenburg, quien lo dio su aprobación para materializar el proyecto de la nueva sede mariana entre 1972 y 1974, en la alcaldía Gustavo A. Madero de la Ciudad de México; actualmente, el segundo recinto religioso más visitado del mundo.

Para realizar las obras privadas o públicas que el país necesita, “hay que proponer proyectos. No esperemos a que alguien más proponga, es momento de arriesgar. En esta industria, hay que hacer maquetas”, señala Eugene Towle, CEO de Softec.

Maquetas de proyectos y también para promover la inversión, acota el consultor, quien relata que en Shangái existe una maqueta interactiva de la ciudad aledaña al Museo del Urbanismo que fue realizada con este propósito y tiene botones para ubicar cuáles son las zonas con uso de suelo habitacional o en donde se permite construir edificios altos. “También ese tipo de maquetas necesitamos”, refiere.

Sin embargo, por parte del gobierno se necesita “una regulación moderna, eficientar procesos y hacer las cosas más directas, transparentes y rápidas. El sector privado puede proponer, pero el gobierno debe ser receptivo y apoyar al gremio”.

A mediano plazo

Por su parte, Enrique Téllez, presidente de la Asociación de Desarrolladores Inmobiliarios (ADI), hace un llamado a repensar los desarrollos de vivienda, oficinas o comerciales tiene mucho que ver con la interacción humana que queramos a futuro.

Tal como ha ocurrido con otras pandemias, por ejemplo, “cuando los arquitectos de principios del siglo XX empezaron a replantear diseños con espacios más abiertos y luminosos, además de mobiliario más sencillo, en este momento debemos aprovechar las herramientas tecnológicas existentes y repensar cómo deben ser los desarrollos a futuro, escuchar a los expertos en salud y a los usuarios”, sugiere Téllez.

En desarrollos verticales, propone el representante gremial, hay que recuperar las terrazas que se han estado perdiendo y son de gran utilidad para abrir la vida privada al contacto con el medio ambiente. En oficinas la curva de utilización de metros cuadrados por empleado se estaba minimizando, ahora el diseño debe estar centrado en privilegiar la interacción y seguridad por encima de la reducción de costos.

En este sentido, agrega Téllez, el concepto de maquetas es muy importante para ofrecer mejores desarrollos inmobiliarios, mejor urbanismo y mejores ciudades, apoyados por las autoridades.

El modelado permite tener retroalimentación de los distintos actores del proyecto. “No significa que una maqueta sea la solución, mas permite elegir la mejor opción desde un punto de vista interdisciplinario”.

Aunque el mercado estaba afectado, en diciembre existía un modelo de negocios probado en el sector inmobiliario. Ahora, con la disrupción que trae consigo COVID-19, surge la necesidad de repensar lo que se estaba haciendo y cómo mejorarlo.

Para el segundo semestre de 2020, la prioridad será contener los negocios y asegurar que se mantengan en marcha, de tal manera que esta visión de hacer maquetas tomará más sentido en el mediano plazo, advierte el presidente de la ADI, organismo integrado por 80 de los desarrolladores más importantes del país.