La industria de la construcción en Londres busca reactivarse y “sanar” sus actividades, que fueron suspendidas durante cinco semanas por decreto de Boris Johnson, para evitar la propagación del coronavirus COVID-19.
Durante abril y mayo cerraron al menos 50% de las obras, por lo que hubo un colapso en la industria ese par de meses. “Sólo hubo pequeños promotores, principalmente residenciales, que siguieron adelante en medio de todo eso. Pero ahora la construcción está volviendo y lo ha estado haciendo en los últimos meses”, dijo Gareth Belsham, director de la consultora Naismiths a AFP.