Publicidad
Publicidad

La promesa de conectividad del Tren Lechería-AIFA enfrenta incógnitas y cambios

El proyecto clave para conectar al aeropuerto con la Ciudad de México dejó de ser una concesión de Ferrocarriles Suburbanos, ahora la Secretaría de Infraestructura y la Defensa se harán cargo de él.
jue 20 marzo 2025 10:09 AM
Renuncia Ferrocarriles Suburbanos: Tren Lechería-Aifa enfrenta dificultades para su apertura
La SICT argumentó que la separación de Ferrocarriles Suburbanos fue porque la empresa declinó la concesión; ésta respondió que no fue decisión suya, sino que el gobierno solicitó su "desincorporación".

El Aeropuerto Felipe Ángeles tiene un gran “pero”: su conectividad. Desde que estaba en construcción, organizaciones como la IATA (Asociación Internacional de Transporte Aéreo, por sus siglas en inglés) señalaron que su limitada movilidad hacia el resto del Valle de México era un problema.

Como respuesta, se habilitó infraestructura para automóviles, establecieron rutas de autobús y camionetas, y se alargó una línea de Mexibús con estaciones dentro del complejo aeroportuario, pero su mayor apuesta de transporte público masivo fue el Tren Suburbano.

La promesa fue tener una inauguración dos meses después de la apertura del aeropuerto, el 21 de marzo de 2022. Tres años después, la obra sigue inconclusa y con cambios en el proyecto original.

Publicidad

El último movimiento que volvió a poner en el mapa el proyecto del tren, fue el retiro de la concesión de la empresa privada Ferrocarriles Suburbanos, para que la sección AIFA-Lechería sea terminada y operada por la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) y la Secretaría de la Defensa Nacional (Defensa).

La dependencia declaró que la concesionaria declinó el título. No obstante, la empresa respondió que fue el gobierno el que tomó la decisión de cambiar el esquema de inversión público-privado a 100% público.

"(Esta es la) razón por la cual, a petición de la autoridad se acordó la desincorporación del ramal Lechería - Jaltocán - AIFA en la Concesión del Tren Suburbano", declaró la empresa en una tarjeta informativa.

Retos presupuestales

La inversión requerida para el proyecto ha presentado variaciones. En 2021, Maximiliano Zurita, director general de CAF, estimaba un costo "entre 20 y 22,000 millones de pesos, financiada en 50% por la CAF y el otro 50% por el gobierno federal", dijo en una entrevista con Obras.

En el 2022, las estimaciones oficiales eran menores y aseguraban que el costo sería de 12,479 millones de pesos (mdp), cifra que posteriormente se elevó a los 25,800 millones de pesos, presupuestados actualmente.

Los cambios en el presupuesto fueron atribuidos a la complejidad técnica, la cual contempla tres viaductos y ocho puentes vehiculares, debido a que el trazo del tren atraviesa zona urbanizada.

El costo total de conectar el aeropuerto con la Zona Metropolitana evidenció ajustes similares: el acceso principal a cargo de la SICT pasó de un costo proyectado de 4,200 millones de pesos a 5,030 mdp tras las licitaciones.

En total, se planearon destinar de manera total 41,097 millones de pesos en infraestructura de conectividad, misma que sería financiada entre el sector público y privado, con otros proyectos complementarios como el enlace entre Circuito Exterior Mexiquense y el AIFA y la modernización de la Autopista México-Pachuca.

Retos de coordinación

La división de responsabilidades ha sido un factor determinante en el desarrollo.

La Defensa construyó la terminal del Suburbano en el aeropuerto y aproximadamente ocho kilómetros de vía que, quedó lista, al mismo tiempo que la inauguración de la terminal. El resto de los trabajos quedaron bajo responsabilidad de la SICT y CAF.

En el 2023, el capitán Andrés Arias González, subdirector de movilidad del AIFA, explicó que mientras la parte construida por el Ejército ya estaba completa, el resto de la ruta aún se encontraba en obra civil.

Esta complejidad de coordinar a múltiples entidades gubernamentales y privadas repercutió en los ritmos de ejecución. Así lo reconoció el general Gustavo Vallejo, quien dirigió la construcción del AIFA.

"El aeropuerto por eficiente que sea en el plan maestro, si no está interconectado con los núcleos urbanos o demás aeropuertos, no operará eficientemente", dijo a Obras en 2021.

La coordinación abarcaba no solo a la SICT y Sedena, sino también a los gobiernos del Estado de México, Ciudad de México e Hidalgo, donde cada uno tiene proyectos de movilidad vinculados al aeropuerto.

Publicidad

Retos técnicos

Uno de los desafíos principales señalados por los desarrolladores fue la liberación de los derechos de vía. Maximiliano Zurita identificaba en 2021 este aspecto como "la ruta crítica de la construcción".

Además, el tren requería una compleja reconfiguración de la infraestructura ferroviaria existente.

"Será necesario mover algunas vías de carga para no afectar a los concesionarios actuales. También veremos desvíos de tuberías, ductos y servicios de cable que están dentro de los derechos de paso", explicó Zurita en su momento.

Según Manuel Gómez Parra, titular de Desarrollo Ferroviario y Multimodal de la SICT, se recolocarían 73 kilómetros de vías de carga que están en uso.

“Primero, se tendrán que reubicar esas vías; después, desmantelar las existentes para poder dar paso a la construcción de las vías de pasajeros, es decir, vamos a construir 105 kilómetros de vía en un trayecto de 15 kilómetros", dijo en 2022.

Retos de cumplimiento

La historia del proyecto está marcada por el incumplimiento de plazos.

Tan solo meses después de la apertura del AIFA, las autoridades prometieron iniciar operaciones en el segundo semestre de 2023, más de un año después del corte de listón del aeropuerto.

Para octubre de 2023, las expectativas se habían ajustado: se esperaba que durante el segundo trimestre de 2024 se colocara la estructura electromecánica para comenzar pruebas y operar en el segundo semestre de ese año, plazo que tampoco se cumplió.

Actualmente, con el cambio de concesión, se abre un nuevo horizonte temporal para el proyecto. La modificación al título firmada el 28 de febrero de 2025 deberá completarse dentro de los 180 días siguientes, pero no se han anunciado nuevas fechas para el inicio de operaciones.

El traspaso

El reciente cambio en la concesión representa una transformación en el modelo de gestión del proyecto y un reflejo de la descoordinación entre las partes involucradas.

De acuerdo con el comunicado de la SICT, la modificación se dio debido a que Ferrocarriles Suburbanos declinó la concesión. No obstante, la empresa respondió que no fue decisión suya, sino que el gobierno solicitó su desincorporación.

El cambio incluye la entrega de cinco trenes propiedad del gobierno federal que se mantenían otorgados en concesión para la operación del tramo.

"El acuerdo inicial contemplaba 10 trenes; las 5 unidades restantes no fueron entregadas formalmente aún al concesionario, toda vez que se encontraban en proceso de asignación a la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes", explica el documento.

El proceso formal de transferencia comenzó el 17 de septiembre de 2024, cuando la SICT y Ferrocarriles Suburbanos firmaron el acta de entrega-recepción de las obras ejecutadas en la ruta Lechería-AIFA, culminando con la renuncia voluntaria de la empresa a la concesión.

Con este cambio, el gobierno federal señaló la necesidad de "realizar acciones para acelerar la conclusión de las obras correspondientes a la Ruta Lechería-AIFA", para lo cual contará con el apoyo de la Defensa.

Publicidad

El futuro

Con el título de concesión modificado, Ferrocarriles Suburbanos operará las rutas Cuautitlán-Buenavista, Cuautitlán-Huehuetoca y San Rafael-Tacuba, mientras el gobierno federal asume directamente el control del ramal hacia el AIFA.

El titular de la SICT, Jesús Antonio Esteva Medina, ha señalado que uno de los objetivos de la actual administración es "regresar a los trenes de pasajeros para dar continuidad a la política iniciada en la administración pasada", con el plan de desarrollar 3,000 kilómetros de vías en este rubro durante el sexenio.

Mientras tanto, las características técnicas del proyecto permanecen:

  • 23 kilómetros de vía doble.
  • Velocidad promedio de 65 kilómetros por hora.
  • Seis estaciones.
  • Capacidad para 10 trenes con 717 pasajeros cada uno.

La gran incógnita sigue siendo cuándo este tren, finalmente, transportará a los primeros pasajeros hacia el AIFA.

Tags

Tren Suburbano

Publicidad

Publicidad