En la banca también se nota el alza de créditos para construir en terrenos propios. Samuel Vázquez Herrera, economista principal de BBVA México, explica que si bien no hay una manera de saber con exactitud cuántos terrenos se compran o venden, se puede calcular a través de dos instrumentos: el crédito para construcción y el crédito de liquidez, siendo este último el más revelador, pues consiste en hipotecar una propiedad para comenzar otra obra con el dinero prestado.
El especialista añade que el de liquidez es el más impulsado por las instituciones debido a que hay una garantía del préstamo de dinero, mientras que el de autoconstrucción no es tan usado ya que no hay una garantía sobre algo construido.
“En el de liquidez hemos visto un aumento significativo en el producto y mucho de esto también lo asociamos a un mayor impulso por parte de los bancos, por lo que es demandado, sobre todo en las grandes ciudades del país”, añade Vázquez.
El reto de encontrar terreno
La fórmula es sencilla. En una ciudad, entre más haya personas y vivienda se encontrará menos terreno disponible y será más caro, por lo que la búsqueda de ellos se sale de sitios como la Ciudad de México y su zona conurbada para encontrar sitios en donde haya otro atractivo como playas, o en donde se comienzan a formar otros distritos de negocios.
El precio promedio en el país por metro cuadrado es de 20,000 pesos, comenta Leonardo González, considerando que hay estados como Baja California, cuyo costo se dispara hasta 130,000 pesos por ser principalmente utilizados con fines turísticos.
No obstante, aún hay opciones en lugares ya equipados con infraestructura y servicios:
- Nuevo León: en San Pedro Garza García, colonia Fuentes del Valle.
- Querétaro: en la zona metropolitana, colonia Juriquilla.
- Quintana Roo: Benito Juárez y Solidaridad, en la colonia Puerto Morelos (Cancún). Además, hay disponibilidad y alta demanda en Playa del Carmen y Tulum, en este destino, en la colonia La Veleta o la región Quinche-Cuculcán.
- Sonora: en Puerto Peñasco.
- Sinaloa: en Bahía de Banderas y Mazatlán.
- Coahuila: en Piedras Negras, Arteaga y Allende.
La autoconstrucción no es tan barata
El gobierno federal ha impulsado herramientas crediticias para la autoconstrucción, una práctica recurrente en México debido a que es más accesible para la población. En 2015, 24% de las viviendas registradas fueron creadas de esta manera, de forma que la apuesta son instrumentos como ‘Construyes’, del Fondo de la Vivienda del ISSSTE (Fovissste); ‘ConstruYo’, del Infonavit; y, el crédito tradicional de esta misma institución que ahora también se puede usar para este fin.
Sin embargo, la inflación golpeó a la industria de la construcción y encareció los materiales a niveles históricos. De acuerdo con el índice Nacional de Precios al Productor (INPP), de enero de 2022 a enero de 2023 la edificación residencial creció 9.7% en su valor, ya que los materiales subieron 9.9%, la mano de obra 8.6% y el alquiler de maquinaria 3.8%.
Las ciudades más afectadas fueron Huatabampo, Sonora; Matamoros, Tamaulipas; Tepatitlán, Jalisco; Cortazar, Querétaro; y, Acapulco, Guerrero con 12.6%, 17%, 14.7%, 17.9% y 12.7% respectivamente.